sábado, 16 de enero de 2010

Regalos


Es maravilloso ver la cara de felicidad de la gente cuando le regalas algo que soñaban y que pensaban que jamás podrían tenerlo.

Cuando él se bajó del Ferrari 430 despues de haberlo puesto a tope en un circuito profesional, fue imposble describir con una sola palabra lo que expresaba su cara. Pero es mas dificil intentar describir lo que decía la mía. Me sentí muy feliz de verlo tan feliz.

El próximo regalo: experiencia tandem. Creo que esto de regalar adrenalina me va a provocar un pequeño ataque al corazón. Todo sea por hacer feliz a esa personita que tanto quiero.


Echo de menos mi vida universitaria. Esa época en la que mi única preocupación era aprobar un examen. Ahora me rodean las preocupaciones, aunque algunas no tengan a penas importancia.


Hoy voy a ver a una amiga que no veo desde el colegio, mas concretamente desde 5º de primaria. La verdad esque me hace mucha ilusión verla, y más, el darme cuenta de que la amistad de cuando eres niño, al final es la más sincera y duradera. Aunque hayan pasado tantísimos años, vernos será como si sólo hubieran sido un par de meses.


Tengo hambre.


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1 comentario:

Fernando Gili dijo...

Mi querida amiga. Yo tambien tengo hambre. De usted.
Siempre suyo
Un completo gilipollas